La montaña es un lugar de mujeres. No solo cuando van acompañadas, también cuando la recorren solas.

Integrarse a la naturaleza de manera respetuosa, libre de acoso, para crear espacios seguros de convivencia y desmitificar la debilidad asociada a un sexo, es lo que hace un grupo de mujeres en Panamá que participa del Hiking Feminista, una iniciativa creada por la montañista panameña Nicole Barrios que pretende acercar a las mujeres a la naturaleza, siempre de forma segura.

La experiencia en outdoors le ha enseñado a tomar acción ante riesgos y a mantener la calma; también le ha demostrado que hay situaciones en los recorridos que añaden un riesgo adicional a alguien por ser mujer. Para saber cómo enfrentar esos desafíos, ha creado el Hiking Feminista, una actividad donde aporta sus conocimientos como montañista y se crean espacios de educación y empoderamiento para ellas en la naturaleza.

Una panameña en la cima del Caúcaso

Mujeres, al monte: la naturaleza también es de nosotras

Mujeres, al monte: la naturaleza también es de nosotras

Por su salud mental, Nicole empezó a hacer senderismo en 2012. Buscando cómo involucrarse en actividades al aire libre, encontró un grupo de Facebook que organizaba caminatas los fines de semana.

Con ánimo, se apuntó a una de las salidas del grupo que esa semana iría a una cascada. Sin experiencia en ese tipo de recorridos, que dependen de diversos factores como la dificultad de los terrenos o el clima, acudió mal preparada “Fui en jeans, blusa de tiritas y una bolsa cruzada. Terminamos caminando nueve horas desde Chicá a Sajalices“, comenta en entrevista a Ellas.

Cuando se vive una experiencia llena de dificultades tanto físicas como mentales, pocos se atreven a repetirla. Después de esa primera caminata, Nicole se dio cuenta que los límites mentales, se pueden sobrepasar. Empezó a practicar senderismo todas las semanas y fue desafiando sus propios limites cada vez más.

Mujeres, al monte: la naturaleza también es de nosotras

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Aun si tener las condiciones físicas que le habría gustado, pero contando con la experiencia en senderismo,  en 2015 se atrevió a subir el volcán Barú. Esa subida le demostró que era posible llegar cada vez más alto.

Empezó a interesarse en montañas de más de 5 mil metros y en el alpinismo.  Ha escalado en Costa Rica, Guatemala, Colombia, México, Perú y en Rusia, donde en medio del frío del Caúcaso, llegó a la cima del Monte Elbrús, la montaña más alta de Europa, con una gran sonrisa y una bandera de Panamá. El monte Everest es su siguiente objetivo.

‘No andamos solas’

Mujeres, al monte: la naturaleza también es de nosotras

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En un viaje a practicar montañismo en Perú, Nicole contrató a un guía local. El hombre quiso propasarse con ella. “Cuando ven que una va sola, es extranjera y mujer, creen que eso da paso para algo más”, comenta.

Por esa experiencia, contactó a su amiga Corina, abogada y feminista panameña, para proponerle la idea de hacer una caminata de mujeres, donde ella brindaría su experiencia en senderismo y se encargaría de la logística; y su amiga, dirigiría un conversatorio al llegar al punto de destino. “Corina me decía que siempre escuchaba que si un grupo de chicas va a la montañas, entonces ‘van solas’, eso refieriéndose a que van si ningún hombre”.

Mujeres, al monte: la naturaleza también es de nosotras

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Así, en 2017, fundó el Hiking Feminista, una actividad inclusiva que busca acercar a la mujeres a entornos naturales y enseñarles cómo sentirse seguras en ellos. Han ido lugares como cerro Chame, Camino del Oleoducto de Gamboa, Volcán Barú o Jurutungo, en frontera con Costa Rica. El grupo que empezó con menos de 10 mujeres, ya suma más de 40.

Al llegar a los puntos, se realiza un conversatorio y dinámicas impartidas por profesionales como sociólogas, psicólogas, abogadas o doctoras que acuden, en temas como el mito de la supermujer; salud, higiene y sexualidad en la montaña y fuera de ella; el auto cuidado; enfrentarse al amor propio, la selva sana o cómo hacer denuncias o pedir ayuda si experimentas acoso en los camping.

Para Nicole, estos círculos de conversación también son de aprendizaje para ella. “Hay muchos aspectos de esos temas que no conocía y he ido aprendiendo”. La confianza y la comodidad que brinda hablar de diversos asunto entre mujeres es de gran valor.”Una chica llegó el primer día al hiking y compartió la situación de abuso que vivía en casa. El apoyo que encontró en el grupo jugó un rol importane para ayudarla a salir de esa relación”, relata la montañista.

Para participar, la experiencia previa en senderismo no es necesaria, solo cuando hay recorridos de dos días. A las participantes nuevas, Nicole suele entrevistarlas para conocer más de sus condiciones.  Las caminatas de un día se hacen en terrenos de dificultad fácil a moderada. La idea es que todas puedan participar.

Mujeres, al monte: la naturaleza también es de nosotras

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Las caminatas son gratuitas y cada participante debe cubrir sus gastos de transporte, alimentación. Una de las partes que la montañista destaca de esta actividad es el aporte a la economía que reciben las comunidades aledañas a los senderos, donde siempre se puede contratar a una guía local, a una señora que cocine, a quien alquilar un caballo o un espacio para acampar.

‘No asumas que no puedo’

 

 

 

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Según Nicole, la montaña está llena de estereotipos: que es hostil, ruda, varonil, que hay que ser Indiana Jones para conquistarla; que las mujeres son muy delicadas o débiles.

Situaciones como las que vivió con el guía en Perú, suceden. Son experiencias que si siguen habitando en el silencio, seguirán ocurriendo. Hablar sobre ellas es parte de denunciar los comportamientos que vulneran las experiencias de las mujeres en las montañas.

Ofrecerle a una montañista cargar su mochila, asumiendo que ella -por ser mujer- no puede; intentar abrazarla cuando, por algún motivo, hay que compartir carpa; hacer zoom con una cámara fotográfica a las compañeras mientras están en una cascada para tomarle fotos sin consentimiento; reunirse a catalogarlas según su aspecto físico con lenguaje sexista o no invitarlas como expositoras cuando se dan conferencias sobre montañismo son comportamientos que Nicole cree que hay que visibilizar para que no se perpetúen.

 

 

 

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Para una caminata segura

Una buena preparación y mitigación de riesgos son esenciales para un recorrido exitoso por la naturaleza. La montañista comparte consejos para la experiencia segura en grupos de mujeres:

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