Toma café. Los mejores, aunque no los únicos, vienen de Boquete. Y si tu paladar exige más prueba una tacita de geisha, una de las variantes de café producido aquí que rompe records en subastas.
Date otro gustito con una barra de chocolate panameño que también suele venir de Chiriquí o Bocas del Toro. Tenemos marcas como Bocao, Oro Moreno o I love Panamá Chocolate.
Ejercítate, bien temprano o en la tarde, en la Cinta Costera. Disfruta la brisita del mar y el skyline de la ciudad.
Si el bufete de tu hotel lo ofrece, no rechaces las hojaldres ni las carimañolas.
Visita el museo de la mola que muestra el precioso arte textil del pueblo guna.
Al salir del museo, camina por el Casco Antiguo entre murallas, plazas y murales perfectos para un selfie.
Allí mismo puedes ver el atardecer desde una de sus terrazas.
Si te gusta la historia visita el sitio arqueológico de Panamá Viejo, con un museo que cuenta la historia del lugar. Puedes subir a la torre y tener más vistas preciosas de la ciudad.
Y para historia más reciente, ve a Clayton y conoce parte de la antigua zona del canal y cómo este lugar se ha convertido en un espacio de conocimiento e innovación llamado Ciudad del Saber.
¿Prefieres la aventura? Haz senderismo, cerquita, de alguno de los senderos del Parque Metropolitano, que está a pocos minutos de la ciudad.
Toma una foto de nuestro Cerro Ancón. Lo reconocerás porque en él ondea la bandera panameña.
Si te agarra la lluvia, mírala, apréciala. No te asustes. En los trópicos tenemos aguaceros únicos.
Y siente ‘la calor’. Es nuestro clima húmedo y abrasador.
Refréscate con un agua de pipa.
Añade a tu playlist Viene de Panamá, canción de Afrodisíaco, el grupo panameño que fusiona tradición y nuevos sonidos.
Si te quedas más, planea una gira de avistamiento de ballenas en el Pacífico, suelen verse de julio a octubre.
Pon en tu lista de cosas por hacer, algún día, subir al Volcán Barú, el punto más alto de Panamá. Si lo haces entre enero y marzo, desde su cima puedes ver el mar Pacífico y Atlántico a la vez.
Si eres de surf: apunta estos nombres: playa Santa Catalina, playas Venao, Cambutal y El Palmar.
¿No te quieres ir sin probar algo bien típico de Panamá? Pida un sancocho, prueba mariscos (asegúrate de que la sazón sea colonense o bocatoreña) o anímate con un arroz de combinación en un restaurante chino panameño.
¿De compras? Ve a Multiplaza o a Albrook, este último es uno de los centros comerciales más grandes de Centroamérica. Tómate fotos con todos los animales de sus pasillos. Cuando llegues allá, lo entenderás.


