Delmira Pierce de Racine, leyenda del baloncesto femenino panameño, falleció a los 107 años.

Fue una de las integrantes del histórico quinteto femenino panameño que sobresalió en los Juegos Centroamericanos y del Caribe, que se celebraron en Panamá en 1938.

Delmira nació el 15 de julio de 1918, en Doleguita, provincia de Chiriquí. Tenía 16 años cuando formó parte de la Selección Femenina de Panamá que participó en el primer torneo de baloncesto femenino realizado en Cuba en 1934.

Era conocida como el Ciclón del Caribe, apodo que le dio el periodista cubano Manolo De La Reguera, por su aporte en los Juegos de 1938, donde fue la máxima anotadora.

En 2018, cuando cumplió 100 años ofreció una entrevista a La Prensa donde compartió entre risas su secreto para llegar a esa edad: sin fumar, sin tomar y sin olvidar “la pastilla de la vitamina E”.

Delmira se desempeñó además como profesora de educación física. Dio clases en escuelas como Santa Familia, Instituto Bolívar, Escuela Profesional y, por 25 años, en el Instituto Panamericano.

“Siempre alguien se acuerda de mí, vivo feliz y con una sonrisa, dando gracias por lo que tengo y por lo que hice durante mi carrera como educadora y como deportista”, dijo en aquella entrevista publicada el 28 de octubre de 2018.

La Federación Panameña de Baloncesto (Fedepa) lamentó el fallecimiento de Delmira a quienes describieron como “pionera del baloncesto femenino panameño y ejemplo de entrega dentro y fuera de la cancha”.

“Su legado permanecerá vivo en cada generación que sigue soñando con transformar su vida a través del baloncesto”, se lee en el comunicado compartido en la cuenta de Instagram de la federación.