Tres meses cumplía Maia el día de esta sesión de fotos. Tres meses lleva el chef Alexis Sittón siendo papá.
“Maia cambia cada semana, tiene una nueva sonrisa... Tiene una particularidad, que es algo de la mamá y de mi mamá: le cambia el color de los ojos dependiendo del humor. Darme cuenta de eso ha sido lo más lindo”.
Alexis describe cómo reacciona su bebé cuando está molesta: “frunce el ceño igual que yo cuando estoy amargado o eso es lo que dice mi esposa”. Detalla que los colores de los ojos de su niña son como los de él. “Cuando está recién despierta, los ojos son como grises; durante el día son chocolates; cuando está contenta son color miel”.
Ser padre no es Disney World
Maia llegó tranquila y despierta al estudio de Corporación La Prensa para esta sesión de fotos. El día anterior había grabado una promo con su papá para el programa de televisión Jelou, de TVN, donde Alexis es uno de los presentadores.
La bebé se tomó fotos en brazos de papá vestida con un traje de flores. Luego le pedimos a papá que se quitara la camisa para unas fotografías más íntimas y estilo playero. Alexis Sittón, además de chef y presentador de tv, también surfea.
En este segundo cambio él cargó a su niña, la alzaba y le hablaba. Ella se reía y balbuceaba como queriendo responder. “Es una experiencia hermosa, ver su sonrisa cada mañana, verla cuando se despierta que se estira”.
Alexis ha disfrutado de su paternidad en estos primeros meses pero también reconoce lo que se vive realmente cuando hay un bebé pequeño en casa. Ser padre “es la experiencia más linda del planeta, creo que eso todo el mundo lo dice, lo que no dicen es que durante el primer mes, o el segundo mes, que el bebé se despierta cada tres horas, es lo más horrible. El papá o la mamá que te diga que ama esa parte, es falso”.
“Debemos ser padres honestos y no hacer de esto como un Disney World”, fueron sus primeras palabras en una entrevista virtual que se hizo días antes de estas fotos.
Para fortuna de sus padres, Maia, a sus tres meses, ya duerme ocho horas seguidas en las noches, pero el primer mes “fue intenso”, recalca Alexis y menciona que un padre “debe estar ahí con su bebé y alternarse con su esposa para atenderla, darle comida, limpiarla, bañarla, cambiarla, dormirla, sacarle los gases durante la madrugada”.
Cuando Maia nació
Alexis Sittón se describe como una persona que le gusta tener todo controlado. Su niña iba a ser parto natural, pero terminó siendo una cesárea a última hora. “Mi mayor temor fue lo que pasó; fue un apuro de ya pa’ ya”. Maia estaba programada para Carnavales, pero nació el viernes siguiente: el 4 de marzo de 2022.
Un día su esposa había ido a una cita de control. Al día siguiente, a media noche, sintió que “había perdido algo”. En la mañana de ese día fueron al hospital y su doctor notó que su placenta había envejecido y había perdido líquido amniótico.
“Yo le preguntaba al doctor (Adolfo Tinker, ginecólogo) qué pasaba y él decía que esto no pasaba a menudo. Para mí era mucho estrés y le pregunté hasta tres veces: ‘¿mi esposa y mi hija están bien?’, yo tenía mucho miedo de que algo pasara. Las tres veces el doctor me dijo: ‘están bien y van a estar bien’”.
Sin darse cuenta, esa preocupación le generó estrés. Alexis empezó a sentir dolor en la mandíbula; no le comentó nada a su esposa.
El lunes siguiente al nacimiento de su hija, fue al trabajo pues se estrenaba una nueva temporada del programa Jelou (admite que es adicto al trabajo). Esa semana siguió con el dolor y no podía hablar. Fue al odontólogo y éste le comentó que con el nacimiento de su bebé tuvo tanto estrés que apretó la mandíbula, afectando el hueso.
“Esa fue la historia del nacimiento de Maia, fue tanto el estrés... es mi hija, mi esposa, quería protegerlas, que todo estuviese bien. Cosas de papá primerizo, uno nunca está preparado psicológicamente para que te digan: ‘va a nacer la bebé’. Nunca lo estuve”.
Alexis y su bebé Maia en portada de revista Ellas edición Día del Padre publicada el viernes 10 de junio de 2022.
A cambiar pañales
Una semana después del nacimiento de su bebé, el chef y presentador de tv tomó vacaciones. “Me fui un mes de vacaciones, ‘vacaciones’ -entre comillas-, porque me fui a cambiar pañales, regresé destruído”, cuenta con un poco de gracia.
Confiesa que estaba “obsesionado” con querer ser un buen padre, un padre afectivo. Cuando la bebé lloraba, él salía corriendo a atenderla. “Cuando nace Maia, yo estaba tan enfocado en esta parte que no dejaba a Verónica [su esposa] ser mamá. Quería ayudarla, quería ser un buen esposo y un buen padre”.
Alexis y su esposa hablaron de la situación y ahora se refieren a la frase “cambio de brazos” para cuando la bebé quiere estar en los brazos de mamá y otras veces, en los brazos de papá.
“Tenemos que ser padres. Tenemos que aprender de que tú puedes ir al mall, al parque, al restaurante con tu hijo pequeño sin necesitar a la mamá. Tener ese tiempo [con el niño], porque ese vínculo... lo vas a recordar toda la vida”.
Continúa: “Nosotros como hombres debemos perder el miedo de agarrar al bebé, de cuidarlo, mimarlo, calmarlo, darle amor, tenemos que tomar responsabilidades porque al final del día, ese bebé vino al mundo por dos personas y merece ser criado por dos personas, no por una sola”.
Alexis, su esposa Verónica y su hija Maia. La bebé nació el 4 de marzo y cumplió tres meses el día de estas fotos.
‘Maia va a ser hija única’
Como pareja, ya habían hablado de tener solo un hijo; el tema volvió a surgir cuando nació la bebé. “Maia va a ser hija única, y es lo que hemos decidido”. Recalca que traer a un niño al mundo es una gran responsabilidad; una responsabilidad “de por vida”. “Para mí los estudios son lo principal y los estudios en Panamá son muy caros”.
Yo no voy a ser mejor o peor padre porque no le de una hermana o un hermano a Maia
Expresa que hay dos preguntas que las personas no deben hacerle a otras personas: primero, a la mamá, no preguntarle cuánta leche materna le sale, “eso no lo puedes preguntar, eso no te importa si la mamá da lactancia materna o fórmula, no eres mejor ni peor madre por eso, lo importante es que tu hijo esté bien”.
La segunda pregunta que no se debe hacer, ni a un hombre ni a una mujer, es cuándo tendrán el segundo hijo, “acaban de salir del primero, no preguntes por un segundo hijo, probablemente no quieren saber nada de eso”.
Alexis señala que traer a un niño al mundo es una gran responsabilidad. Comenta que la palabra hombre no se define por la cantidad de hijos, sino por la “calidad” de crianza que se les da. Tampoco significa que por ser hombre no pueda comprarle ropa, vestir a su bebé o comprarle vinchas. “Me encanta verla con vinchas”.
“Cuando nace Maia, yo estaba tan enfocado en esta parte que no dejaba a Verónica [su esposa] ser mamá. Quería ayudarla, quería ser un buen esposo y un buen padre”, Alexis Sittón.
'Yo no voy a ser mejor o peor padre porque no le de una hermana o un hermano a Maia. Esto [traer un niño al mundo] es una responsabilidad de por vida’, Alexis Sittón.