La elección del cardenal Robert Francis Prevost como nuevo papa de la Iglesia católica, adoptando el nombre de León XIV, fue recibida con regocijo y emoción por la Orden de San Agustín (OSA), congregación a la cual pertenece.
Prevost, oriundo de Estados Unidos y nacionalizado peruano, no es un desconocido para Panamá. En 2005, cuando fungía como prior general de la OSA, realizó su primera visita canónica al territorio panameño, recorriendo diversas comunidades agustinas y compartiendo momentos significativos con sacerdotes, laicos y estudiantes.
La panameña Vicky Zambrano, una laica comprometida de la OSA en nuestro país desde hace 26 años, fue testigo de aquella visita, que coincidió con la realización de su promesa laical, realizada en el Seminario San Agustín en Villa Zaita, en marzo de 2005.

La panameña Vicky Zambrano, una laica comprometida de la OSA en nuestro país desde hace 26 años, fue testigo de aquella visita. Foto: Cortesía.
“Éramos dos fraternidades: 24 hermanos de Santa Mónica (grupo al que pertenezco), y 21 de Tagaste. Ambas comunidades tuvimos el privilegio de hacer la promesa de incorporarnos a la Orden de San Agustín y la bendición de recibirla directamente de sus manos”, contó Zambrano en una entrevista por vía telefónica con ELLAS.

Los 24 hermanos de la fraternidad Santa Mónica y los 21 de Tagaste estuvieron acompañados por el entonces superior de la Orden de San Agustín, Robert Prevost. Foto: Cortesía.
Para ella, este acto representó “un compromiso profundo de fortalecer su vida cristiana a través de la oración, formación y el servicio a la Iglesia”.
“Nosotros en las fraternidades somos una comunidad que primero somos cristianos y seguimos a Cristo a través de la espiritualidad que en nuestro caso es la San Agustín”, dijo Vicky, quien es miembro del Ministerio de Lectores de la parroquia Nuestra Señora de Los Ángeles y es la encargada de las remodelaciones del templo.
Zambrano señaló que un padre agustino los guía en la formación espiritual. Durante ese proceso, abordan elementos básicos como la vocación cristiana, comunitaria y misionera.

Vicky Zambrano (derecha) junto a una hermana de la parroquia (izquierda). Foto: Cortesía.
Un congreso de laicos agustinos en Roma
Vicky ha ejercido diversos roles de liderazgo en las fraternidades agustinianas, siendo coordinadora nacional, internacional y regional para la zona norte de Latinoamérica de los países que conforman la orden.
En 2012, participó en un congreso mundial de laicos agustinos celebrado en Roma. “Dichos encuentros se realizan cada cinco años, y Robert, en su rol de superior, siempre estuvo presente, mostrando su cercanía y compromiso con las fraternidades laicas”.
Congreso de laicos agustinos en Roma, julio 2012. Foto: Cortesía.
Un viaje familiar a Europa
En febrero de este año, viajó a Europa con su familia y tuvo la oportunidad de visitar Roma. “Fuimos a la Plaza de San Pedro a rezar el rosario, y le dije a mi hijo: ‘El padre Prevost está presidiendo’. Él podría ser nuestro próximo papa”, recordó.
Se refiere a él como “un agustino misionero, humilde, conciliador y con una sólida preparación intelectual, que tiene la capacidad de escuchar, de comunicarse con todos con sencillez, y de promover activamente el papel del laicado en la Iglesia”.
“Definitivamente, él cuenta con todas nuestras oraciones. Nos sentimos felices, emocionados y agradecidos, pero también conscientes de que asume una gran responsabilidad a nivel personal como en su vocación religiosa”, enfatizó.