Luego de cinco mundiales, el argentino Lionel Messi logró alzar el trofeo más preciado de su carrera: la Copa del Mundo.

Lo logró 36 años después de que Diego Armando Maradona también la levantara ante el triunfo de Argentina en el Mundial de 1986.

Además de llevar a su equipo a la victoria, Messi fue reconocido como el jugador más valioso del torneo. Este galardón le fue entregado minutos antes de que su equipo completo recibiera medallas y pudieran vivir el gran momento de sus carreras, levantar el preciado trofeo.

Messi, como capitán de la Selección de Argentina, fue el encargado de levantar la Copa. Sin embargo, un gesto diferenciador marcó ese momento: Messi lo hizo luciendo una túnica larga semitransparente llamada Besht que el Emir de Qatar, Tamim Bin Hamad, colocó sobre sus hombros segundos antes de alzar el trofeo.

Esta capa larga es una pieza árabe tradicional que solamente pueden llevar miembros de la realeza, eruditos religiosos y personas de alto rango en los países árabes. Solo es utilizada por hombres. Es usada desde hace miles de años y es el equivalente a un tuxedo black tie, trajes que solo se usa en las ocasiones de mayor prestigio. Está confeccionada con pelo de camello, lana de cabra y bordes con cinco franjas tejidas con hilos de oro por cinco artesanos diferentes.

La túnica dorada de Messi: bordada con hilos de oro y hecha con pelaje de camello

Que el emir se la entregara a Messi fue un gesto de honor según la cultura del país. “Los guerreros árabes la utilizaban después de una victoria. También la usa la familia real… El emir de Qatar se la entregó a Messi en señal de respeto. Es un guerrero que ganó por su país, Argentina” dijo el productor y director Tallie Dar sobre la pieza en su cuenta de Twitter.

“Es nuestro atuendo oficial. Siempre lo utilizamos para compromisos que celebran los momentos más importantes en nuestras vidas”, describió Hassan Al Thawadi, secretario general del Comité Supremo para la organización y el legado de Qatar 2022 en una entrevista en zona mixta luego de la final del torneo, que coincidió con la celebración del Día del Fundador, una fecha nacional de Qatar.

La túnica dorada de Messi: bordada con hilos de oro y hecha con pelaje de camello


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