Una de las frases más odiadas por todos en algún momento de su vida es: “yo te quiero mucho, pero como amigos…”. Nooo, todo se derrumba, las paredes caen sobre ti, el desayuno regresa, tu esperanza de un mundo mejor se desvanece. Pones tu poker face, usas toda la energía para aguantar las lágrimas, salvar el poco orgullo que te queda, das vuelta y arrancas una digna retirada.
Este rechazo no debería ser diferente a cualquier otro ataque a tu corazón, pero en muchas ocasiones es peor. Conoces lo grandiosa que es ella, has visto sus peores defectos y aún la amas.
Tienes años guardando ese secreto, escuchando sus quejas y siendo paño de lágrimas a todas las ATROCIDADES perpetradas por sus EX, que siempre terminan en “¿por qué no hay más hombres como tú?”.
Mientras pensando, “Pues, bueno, aquí estoy, no busques más”. Lo que no estás entendiendo es que en muchos casos las mujeres DICEN querer algo, pero en sus acciones y elecciones te das cuenta de que buscan otras cosas. Recordemos que las mujeres son fuertemente motivadas por sus emociones, y aunque de su boca sale lo que piensan, a la hora de elegir pareja es otra fuerza la que las mueve.
Ella dice que quiere un tipo bueno, trabajador y divertido, pero sale con el buenón, engreído, con carro y aburrido, probablemente el que la rechazaba o era difícil de conseguir. En cambio tú, el amigo con el que se ríe y puede confiar, eres como un hermano; no despiertas sus pasiones.
Nosotros los hombres somos muy básicos, elementales, no nos gustan los juegos ni las estrategias de conquista, pero en el mundo de las mujeres las cosas funcionan diferente. No puedes ser tan directo, no puedes decir lo que estás pensando, no debes estar TAN presente, tienes que tener una MÍNIMA estrategia, jugar el juego de ellas, el emocional y psicológico, aunque no te guste. Recordar cuál es la meta.
Mi recomendación para los hombres es la siguiente: no te empecines con una mujer, haz tu acercamiento, tira tus dardos, si no ves respuesta, sigue con la próxima. Tus probabilidades de éxito con la estrategia de insistencia son mínimas y contraproducentes. Mi consejo para las chicas es: sé directa; si un tipo te gusta, hácelo saber. Nada de indirectas, ojitos ni jugadera de cabello, muy probable es que el tipo no entienda. Es verdad que algunos se pueden querer aprovechar de tu acercamiento, pensando que te tiene “lista pa la foto”, pero ahí entra tu capacidad de dilatar los encuentros cercanos y dar el tiempo necesario para conocerse.
Entonces, si estás enamorado secretamente de tu amiga/o puedes: 1) Morir en silencio y asegurar la amistad, 2) Decírselo y arriesgarte a quedar sin nada, 3) Tantear el terreno. Si ves que no hay chance, aléjate un poco, que note tu ausencia. Tú también habla de posibles parejas para crear celo. Haz que note lo mucho que vales y lo que se está perdiendo. Si nada de eso funciona, entonces elige entre las dos primeras opciones. Saludos de un turista en Venus.

