Hola, amigas de Revista Ellas, les cuento que decidimos a hacer el primer viaje a la playa con Bruna.

Viajar con un bebé siempre es una aventura, después de ir con ella a Europa, dije que no lo repetiria mientras estuviera lactando; pero no me pude resistir, porque me gusta el movimiento y si es con mi hija, aún más. Poder mostrarle el mundo no tiene precio.

Ahora… ir a la playa con un bebé lleva su logística. Así que te comparto algunos esenciales y tips para que tu escapada a la playa con tu bebé sea más disfrutable y menos estresante.

Lo que no puede faltar:

  • Paraguas extra large: La piel de los bebés es extremadamente sensible y antes de los 6 meses no pueden utilizar protector solar, así que hay que cuidarlos muchísimo del sol. Un buen paraguas es clave y entre más grande mejor.

  • Ropa fresca: Idealmente, manga larga ligera, gorrito con ala ancha y gafitas, si tu bebé las tolera.

  • Pañales especiales para agua: Un must, si vas a meter a tu bebé en el mar o en una piscinita inflable, estos pañales evitarán accidentes y se mantendrán más cómodos. Puedes encontrar opciones reutilizables y desechables.

  • Toalla grande o manta tipo muselina: Sirve como cambiador, para secarlo, para cubrirlo o simplemente para que juegue sobre la arena sin ensuciarse.

  • Hidratación: Como a todos, a los bebés también les da más sed en la playa, así que si tu bebé aún no toma agua, dale más pecho o fórmula si es el caso.

  • Botiquin: ¡Imprescindible! Ten a la mano todo lo que puedes necesitar para una emergencia. También te recomiendo llevar agua dulce para limpiarlo al salir del mar y hasta agua filtrada para sus ojitos, ya que la arena se mete en todos lados. “Mosquitán” es un infaltable, “Sterimar bebé” y aspirador nasal.

  • Ventilador portátil: Obligatorio porque los bebés sudan mucho y si hay algo que vives sí o sí en la playa es que te da calor.

  • Juguetes pequeños para arena o agua: Unos cuantos para estimularlo y que su experiencia sea entretenida.

Te dejo también alguno tips que harán toda la diferencia:

  • Elige bien el horario: Lo ideal es ir temprano en la mañana o después de las 4:00 p.m. para evitar el sol más fuerte.

  • Haz una pausa para las siestas: Si tu bebé necesita dormir, crea un espacio tranquilo en sombra, con su muselina o incluso en el portabebé.

  • Menos es más: No necesitas llevar todo el cuarto del bebé a la playa. Lleva lo justo y funcional.

  • Mentalízate: El plan no será perfecto; pero… ¡será memorable! Puede que no dures más de 2 horas en la plata, que haya berrinches y que no te puedas tanear ni meter al mar… y está bien. Cada momento es parte de la experiencia. ¡La vida como padres cambió!

No lo pienses más y crea recuerdos para siempre.

Besos,

Sheldry