Ganar el premio gordo en la lotería es el sueño de millones de jugadores. Ganar la lotería está lejos de ser la solución a todos sus problemas o un seguro hacia la felicidad.
En Estados Unidos y Europa hay estudios que apuntan a que casi el 80% de los millonarios por azar dilapidan su fortuna en una década y Paul Golden, del Fondo Nacional para la Educación Financiera en Estados Unidos, estima que un 70% lo perderá todo en un lustro. Familias destruidas, vicios, divorcios, y hasta pérdida de amigos han sido las consecuencias.
Una persona muy sabia allegada a mí dice: si usted no sabe manejar 100 dólares es poco probable que maneje bien millones.
Esto también ocurre al recibir un aumento, y la persona se amolda al nuevo nivel de ingresos.
Mientras llega su momento de ganarse la lotería, es bueno tener en cuenta estos consejos:
1. Si compra lotería, aunque aún no haya ganado piense qué hará con el premio. Los afortunados deberían establecer una planificación financiera que responda a sus necesidades económicas y a su perfil de riesgo.
Contrate ayuda profesional de asesores legales y financieros competentes y honestos.
2. Piense en cancelar todas sus deudas y no incurrir en nuevas. Revise si cancelar las deudas es más rentable que invertir el dinero a una mejor tasa de interés.
3. Revise el estatus legal de sus propiedades, bienes y las relaciones familiares, pues el dinero enloquece a muchos y les hace generar pensamientos tóxicos.
4. No informe a todos que ahora tiene mucho dinero. Recuerde, le abordará tanto la gente que le quiere como amigos con planes e ideas grandiosas, así como posibles secuestradores.
5. Controle sus impulsos. Hay personas que no le dicen a nadie que ganaron millones, siguen con su vida normal, planificando sus acciones y meses después cobran el premio, pero ya tienen un plan de inversiones.
6. Tómese un tiempo. Haga oídos sordos a las peticiones de sus familiares que piden carros, apartamentos, viajes y otros.
7. Guarde una parte del premio en efectivo para poder hacer frente a imprevistos.
8. Revise bien su estatus fiscal, póngase al día en sus impuestos y coloque el dinero en diferentes entidades bancarias y en diferentes instrumentos de ahorro e inversión.
9. Arme una estructura legal que proteja sus activos: fideicomiso, fundaciones de interés privado, sociedades anónimas y cuentas en el extranjero. Haga un testamento bien pensado. Controle su deseo de ayudar a toda su familia.
10. Bien asesorado, piense en comprar oro físico, es decir, en lingotes y monedas o certificados oro.