Una tarjeta de débito se parece a una chequera electrónica, pero con muchas más ventajas. La tarjeta de débito se basa en la existencia de una cuenta. Para utilizarla, siempre debe haber dinero en ella. A ella pueden asociar por lo menos dos cuentas. Usted puede preguntar en su banco cuántas tarjetas puede asociar.

Las tarjetas de crédito, débito, crédito y prepago no son lo mismo. La diferencia principal está en que el crédito significa comprar hoy y pagar mañana, el débito es comprar hoy y pagar hoy, y el prepago pagar hoy y comprar mañana.

Creadas en 1978 en Estados Unidos, las tarjetas de débito inicialmente eran otorgadas a los mejores clientes de los bancos, para evitarles la molestia de cargar con cheques.

De manera que solo tenían que enseñarla en un comercio como garantía de que el banco se encargaría de hacer el pago. Para la década de los años 80, con el avance tecnológico, los bancos comenzaron a usar la red de puntos de venta y cajeros automáticos de las tarjetas de crédito para usar las tarjetas de débito.

En Panamá

Las tarjetas de débito llegaron a Panamá en la década de los 90, y con ello cambiaron para siempre la manera en que las personas pagan y manejan sus cuentas bancarias.

Al pagar con tarjeta de débito en un establecimiento, esta se pasa por un lector en un dispositivo conocido como terminal punto de venta (TPV). En el mismo momento en que se realiza esta operación, se toma el dinero directamente de la cuenta del cliente para ser transferido al negocio. A cambio, el comprador recibe un comprobante de la operación que deberá comparar con su estado de cuenta para llevar un buen control de sus gastos.

Algunas de las ventajas de utilizar tarjetas de débito son las siguientes: Más facilidad en los pagos: Son más fáciles de usar que una chequera, y no en cualquier establecimiento reciben cheques a manera de pago. El uso de la tarjeta de débito evita las inconveniencias como: la falta de cambio exacto en los comercios, el recibir cambio en monedas de poca denominación o el riesgo de recibir billetes falsos.

Al viajar al extranjero no tienes que llevar cheques de viajero o moneda extranjera. Puesto que hacen uso de tu propio dinero, las tarjetas de débito no cobran intereses. Además, no hay que pagarla cada mes, porque no se acumulan deudas. Suelen ser más seguras que el dinero en efectivo, puesto que, en caso de 08extraviarla, es posible cancelarla por teléfono.

Se pueden utilizar para realizar compras por internet y cada vez más sitios electrónicos las aceptan. Las tarjetas de débito, a diferencia del efectivo, permiten llevar un control de los gastos, ya que con cada compra se nos entrega un váucher o comprobante impreso.

Al usuario le corresponde cuidar la tarjeta, el pin y la integridad física del plástico.