Hacer un presupuesto puede parecer sencillo. Pero, por alguna razón, la gran mayoría de las personas sienten que es imposible cumplirlo y allí es cuando nace esa sensación de que “el presupuesto no funciona”. El problema real no es el presupuesto, sino los errores que cometemos al hacerlo.

Por ello, aquí te comparto los 7 pecados más comunes del presupuesto y, lo más importante, cómo corregirlos para que esta vez, el presupuesto si funcione,

Pecado #1: Ser demasiado estricto

Muchas personas lo hacen tan rígido que, al primer imprevisto, terminan abandonando el presupuesto. En realidad, es un plan que debe guiarnos, pero, también debe tener la capacidad de ser flexible.

¿Cómo corregirlo? Siempre mantén un fondo de emergencia para poder cubrir esos imprevistos. También, mantente pendiente que si en algún rubro gastas de más, revisa qué otra categoría puedes disminuir de tu presupuesto y así, compensar ese gasto.

Pecado #2: Olvidar los gustitos y diversión

Hay quienes solo anotan los gastos básicos o compromisos. Pero, la realidad es que no somos robots y es mentira que no vas a salir a comer al menos un helado en todo el mes.

¿Cómo corregirlo? Incluye una categoría de entretenimiento donde presupuestes un monto para que puedas disfrutar sin culpa y sin afectar el resto del presupuesto.

Pecado #3: Subestimar los gastos pequeños

Ajá, los famosos gastos hormiga. Algunas personas omiten presupuestar las suscripciones, delivery y de más. Este tipo de gastos puede representar una gran moto a final de mes, si no llevamos un control y peor aún, si no lo incluimos en el presupuesto.

¿Cómo corregirlo? Agrégalo como un monto en la categoría de entretenimiento y ve registrando cada gasto que realizas, así sea en una app, bloc de notas del celular, Excel, libreta, lo que gustes.

Pecado #4: Pensar que el presupuesto es sólo una lista de gastos

El presupuesto es más de la lista de cosas que tienes que pagar.

¿Cómo corregirlo? Incluye tus objetivos financieros como ahorro o inversión y que sea la primera transferencia que hagas apenas recibes tu ingreso.

Pecado #5: Olvidar los gastos anuales

La mayoría de las personas terminan endeudándose o saliéndose del presupuesto porque ese mes les toca un gasto atípico: el mantenimiento del auto, comprar el gas en casa, los útiles escolares, en fin.

¿Cómo corregirlo? Haz una lista de tus gastos anuales y comienza a ahorrar cada mes una parte para ese gasto anual. Ese ahorro, inclúyelo en tu presupuesto y así, no te caerá el gasto de sorpresa.

Pecado #6: Hacerlo y no darle seguimiento

Lo haces, pero luego lo guardas hasta la siguiente quincena. El presupuesto es 50% hacerlo y 50% seguirlo.

¿Cómo corregirlo? Anotar todos los gastos o manejarte con una tarjeta débito y así, mantener el registro de todas tus transacciones en la banca en línea de tu banco.

Pecado #7: Hacerlo complicado

Miles de categorías y detalles, miles de fórmulas. Eso hace que te rindas antes de empezar.

¿Cómo corregirlo? Empieza simple y ve mejorando. Utiliza categorías sencillas y establece tus propias reglas de cómo clasificar cada gasto.

Hacer el presupuesto no se trata de limitarte sino de darte claridad y libertad.