Sofía ha escuchado el énfasis que hago en la importancia de tener una tribu. Le impresiona saber que su vida va a llegar tan lejos como los estándares de las cinco personas con las que pasa más tiempo. Mira a su alrededor y no le entusiasma lo que ve. Siente que está quedándose estancada.

En tu caso, si piensas en las cinco personas con las que tú pasas más tiempo, ¿es en ellas en quien te quieres convertir y lo que quieres para tu vida? Sofía dice estar cansada de encuentros sociales superficiales, de relaciones básicas, conversaciones banales, amigos bla o con los que se puede entretener, pero no crecer.

Ella quiere rodearse de gente estimulante, retadora intelectual y emocionalmente, personas emprendedoras, positivas, de una tribu que siempre le ponga garra y ganas a la vida, que la impulse a querer más para ella y para todos, que lo crean posible y que mutuamente se apoyen en ánimos, compañía y soporte.

Sofía comparte que se siente trabada en un grupo que siempre tiene las mismas conversaciones, va a los mismos lugares hablando de las mismas cosas, no sale de su rutina y tiene excusas para todo. Sofía quiere nuevos amigos “interesantes” y no sabe dónde encontrarlos. ¿Es ese tu caso también?

Lo primero es salir del callejón sin salida que son las afirmaciones negativas. “No hay gente interesante y la gente que me rodea es plana”. ¡Bum! Desde ese lugar no hay nada que tú puedas hacer. Estás aplastada por tu percepción de la realidad. Podríamos hacer un trabajo más profundo sobre las personas que tienes ahora a tu alrededor, las relaciones espejo y qué reflejan de ti, pero hoy nos enfocaremos en la situación deseada.

La manera de salir de una realidad percibida es a través de la pregunta. La pregunta siempre abre posibilidades y permite aclarar. Donde una afirmación categórica pone un muro, la pregunta siempre despeja una oportunidad. Ese va a ser nuestro vehículo para los tres pasos que te llevarán hacia amigos interesantes de la misma forma que llevan a tantos otros.

1. Define quiénes son

Podrás alcanzar todo lo que seas capaz de visualizar. No conseguimos metas, o en este caso amigos, si el concepto se parece a una bola de humo sin definición concreta, algo que sí queremos, pero que no sabemos definir bien.

Toma papel y pluma y escribe. ¿Por qué los quieres? Ponle ganas; contestar “no sé” no vale. ¿Qué es para ti un amigo interesante? Necesitas poder describir qué es interesante para ti porque es un término relativo que tiene un significado diferente para cada quien. Yo puedo considerar interesante a alguien que a ti no te entusiasme para nada y viceversa. Esto es sobre la gente que tú quieres en tu vida según tus parámetros. ¿Cómo es su personalidad? ¿Qué los caracteriza? ¿Qué hacen? ¿Qué les gusta? ¿En qué quieren ser mejor? ¿Sobre qué aprenden? ¿Cuál es su nivel de energía y vibración?

Imagínate que estás con ellos ahora: ¿qué tipo de conversaciones tienen? ¿A quiénes escuchan? ¿Cómo lucen? ¿Cómo cuidan su apariencia? ¿Cómo se sientan o caminan? ¿Cómo se comportan con otros y entre sí? ¿Cómo se cuidan? ¿A qué sitios van? ¿Cómo se divierten? ¿Qué libros leen? ¿Qué comen? ¿Qué actividad física hacen? ¿Qué es para ellos algo relax y qué es para ellos una aventura?

En este momento puedes visualizarlos y vivirlos, imaginarte entre ellos, sabes quienes son, qué hacen y cómo viven. Ahora sí estás buscando a personas concretas. Esa tribu que buscas está allí, está en todas partes, porque hay muchos grupos diferentes para características diferentes.

2. Alinéate

Te llamaría la atención las veces que las personas contestan las preguntas de arriba entusiasmadas y cuando les pregunto: “¿y tú eres así? ¿Ellos verían eso mismo en ti?”, y se quedan en blanco…

Es muy importante que te alinees con las personas “interesantes” que quieres en tu vida porque atraes a aquellos semejantes a ti. ¿Eres tú esa persona? ¿Cómo aportarías tú a estos amigos? Cuando te vean llegar, ¿van a saber que eres uno de ellos? ¿Te considerarían una persona interesante?

Si sientes que tú también aspiras a ser así, pero no estás allí, ¿en qué tendrías que afinar para estar en sintonía con las personas que quieres en tu vida? ¿Qué hábitos deberías incluir? ¿Cuáles deberías dejar atrás? ¿Qué deberías creer de ti, de los otros y del mundo?

Para que seas una combinación y complemento perfecto con estas personas tú tienes que ser una de ellas. De esa manera ese encuentro va a ser natural. A veces queremos amigos interesantes, pero no caemos en cuenta de que estamos achantados en una rutina, vida, conversaciones e intereses planos. Y la verdad, todos queremos personas que nos aporten valor. Ellos también.

3. Encuéntralos

Si has hecho a conciencia el paso uno y dos, ya sabes a quiénes buscas y sabes que son de la misma tribu, así que vamos a ver cómo encontrarlos.

Cuando tienes los pasos de arriba alineados te sorprenderás lo fácil que es “llegar a casa”. Imagina nuevamente a estas personas al detalle, y por consecuencia podrás contestar: ¿dónde se reúnen personas así? ¿En qué grupos se relacionan? ¿A qué asociaciones pertenecen? ¿A qué eventos asisten? ¿Qué cursos atienden? ¿Dónde hacen su actividad física? ¿En qué áreas trabajan? ¿Dónde comparten sus mismos intereses? Con esta información es momento de tomar una actitud proactiva y salir a buscarlos.

Ya sabes que tienes cosas en común y que pueden aportarse mutuamente, así que da ese primer paso. Acércate. Si están alineados, la conversación y los encuentros van a fluir naturalmente. Esos amigos te están esperando tanto como tú a ellos. Sé creadora activa de tu vida, tiende el puente y sé la primera en cruzarlo. Gente estupenda y cosas maravillosas están a solo un paso de tu parte.