Muchas reinas de belleza provienen de este país. Venezuela acumula siete coronas de Miss Universo y seis de Miss Mundo. De ahí su referencia como país de “mujeres bellas”.

Recientemente se conoció que una mujer panameña, de 54 años, murió en esa nación tras someterse a un procedimiento quirúrgico en una clínica ubicada en la ciudad de Maturín, estado Monagas. El año pasado, una mujer de 30 años, de nacionalidad colombiana, falleció tras una rinoplastia y una liposucción en la ciudad de San Cristóbal, estado Táchira.

Quizás por la fama de sus reinas y por el cambio de dólares a bolívares que abarata los costos, las panameñas se sienten atraídas y viajan a ese país con la esperanza de regresar con alguna mejoría en su cuerpo. “Muchas personas de Venezuela vienen a buscar pacientes, ofrecen consultas en clínicas clandestinas para llevárselas a operar a ese país con promesas de resultados espectaculares. Lastimosamente esto no es la realidad para todas”, advierte el dermatólogo Charles Mckeever.

El doctor señala que el cambio de dólares a bolívares disminuye el costo de cualquier procedimiento estético en el país suramericano. Por ejemplo, unos implantes de seno en Panamá pueden costar entre 3 mil 500 y 5 mil dólares, mientras que en Venezuela, al cambio, puede costar la mitad. Otra razón por las que las panameñas acuden a este país es porque se lo ha recomendado alguna amistad que ha tenido buenos resultados.

Mckeever recalca que someterse a cualquier tratamiento estético tiene sus riesgos, pero el riesgo aumenta si se realiza en un país con limitaciones como Venezuela. “El peligro no es lo que piensan la mayoría porque van seguras que les irá bien y con la fama de las venezolanas en Miss Universo, ¿quién no quiere verse mejor?. El costo que les representa aquí también influye, antes no era tan caro, ahora lo es. La comparación de precio convence a cualquiera”.

Detalla que las pacientes que acuden a someterse a estos procedimientos son personas con un nivel de educación alto, incluso con título universitario. “Las gangas y rebajas y dos por uno no existen en medicina. Si hay un 50% de descuento, te cobraron 50% más de lo que debieron”.

En su consultorio, Mckeever recibe al mes hasta cinco casos de pacientes con complicaciones, de los cuales tres son nacionales y dos son extranjeros. Él piensa que esto seguirá ocurriendo porque el turismo médico crece. Entre los casos que ha atendido están reacciones adversas al material de sutura, infecciones tipo abscesos por falta de antibiótico y terapias preventivas, pérdida de tejidos y hasta “ausencia de ombligos“. Incluso ha recibido pacientes que dicen que le inyectaron ácido hialurónico como material de relleno que en realidad era silicona líquida, prohibida para ser inyectada en humanos.

Así como Venezuela, Colombia también es otro destino buscado por las panameñas. En estos países se suele ofrecer a un costo más económico procedimientos estéticos como liposucción, lipoescultura, transferencia de grasa, injerto de pelo, implantes de mamas, aumento de labios o de nalgas, entre otros.