Muchas de las personas que disfrutan tomando un té y lo beben a diario desconocen que esta popular infusión puede ofrecer numerosos beneficios para la salud del cabello, explican desde Hospital Capilar (HC).
La teína, sustancia análoga a la cafeína del café y presente en el té, puede ayudar a mejorar la circulación sanguínea en el cuero cabelludo, fomentando un ambiente más saludable para el crecimiento del pelo, mientras que la aplicación de esta bebida en el cabello puede favorecer la llegada de nutrientes y oxígeno a los folículos pilosos, según HC.
“Además, algunos estudios sugieren que ciertos compuestos del té, denominados polifenoles, que poseen propiedades antioxidantes y contienen teína, podrían tener efectos protectores sobre el cuero cabelludo y los folículos pilosos frente al daño oxidativo”, aunque esos efectos serían menos directos y potentes, explica la doctora Carmen Orozco Bello, de Hospital Capilar.
Desde Hospital Capilar, explican que hay varios tipos de té que pueden ser utilizados para el cuidado del cabello.

La circulación sanguínea en el cuero cabelludo se ve favorecida por las propiedades de la teína que contiene el té. Foto: Hospital Capilar.
Distintas variedades, múltiples beneficios
“El té verde, rico en antioxidantes y catequinas, puede ayudar a reducir la inflamación del cuero cabelludo y a combatir la caída del cabello. También contiene compuestos que, al parecer, podrían bloquear la DHT (dihidrotestosterona), hormona que contribuye a la alopecia androgenética”, según la doctora Orozco Bello.
Añade que “el té negro contiene altos niveles de teína y antioxidantes, que pueden ayudar a estimular el crecimiento del cabello y mejorar la salud del cuero cabelludo”.
Por su parte, “el té o infusión de manzanilla, es suave, puede ayudar a calmar un cuero cabelludo irritado y también utilizarse para aclarar el cabello de manera natural”, mientras que “el té de menta, es conocido por su efecto refrescante, puede mejorar la circulación en el cuero cabelludo y tiene propiedades antimicrobianas”, según explica Orozco Bello.
Explica que el té “puede ser utilizado de diferentes maneras para cuidar el cabello”, por ejemplo, como un enjuague capilar destinado a fortalecer el cabello y mejorar la salud del cuero cabelludo, preparando una infusión de té fuerte, dejando que se enfríe y usándola como enjuague final después del champú”.

El té verde, rico en antioxidantes y catequinas, ayuda a reducir la caída del cabello y la inflamación del cuero cabelludo. Foto: Hospital Capilar.
Modos de aplicación y contraindicaciones
Para aplicar el té en forma de espray, “se puede colocar la infusión en una botella con atomizador y rociarla sobre el cabello y el cuero cabelludo, lo cual puede refrescar esa zona capilar y agregar brillo al cabello”, según puntualiza.
“El té también se puede aplicar en forma de mascarilla capilar, mezclándolo con otros ingredientes naturales como miel o aceite de coco, para crear un compuesto que pueda aplicarse sobre el cabello durante 20-30 minutos antes de enjuagarlo”, indica.

Unos compuestos antioxidantes del té denominados polifenoles, podrían tener efectos protectores del cuero cabelludo. Foto: Hospital Capilar.
“En general, no existen tés que estén completamente contraindicados para la salud capilar, pero hay que tener precaución de no aplicar en exceso el té negro o el té con alto contenido de taninos, ya que pueden oscurecer o resecar el cabello en exceso”, advierte la especialista de HC.
La aplicación de té negro podría ser desaconsejable para las personas con pelo claro o que deseen mantener su color natural, puntualiza la doctora Orozco Bello.
Por su parte, “los tés con alto contenido de taninos, como el té negro y algunos tés verdes, pueden aumentar la sequedad del pelo y el cuero cabelludo si se usan en exceso, por lo que es importante equilibrar su uso con otros tratamientos hidratantes”, concluye la especialista de HC.

Algunas plantas medicinales que pueden tomarse en infusión, son utilizadas en productos de cosmética y salud capilar. Foto: LeClan.
Plantas medicinales: en infusión y cosmética
En el ámbito de las medicinas complementarias y naturales, es común el uso de infusiones a las que se les atribuyen propiedades para mejorar la salud del cabello y frenar su caída. Estas preparaciones se elaboran infusionando diversas mezclas de plantas.
Las llamadas “infusiones capilares” suelen incluir distintas partes, principalmente hojas y flores, de plantas como tomillo, laurel, ortiga, lavanda, azahar, dulcamara, malva, abrótano, cola de caballo, rúcula, alfalfa, nogal, milenrama, romero, verbena, áloe vera, jengibre, abedul, entre otras.

Las infusiones para la salud capilar incluyen como ingredientes distintas partes de las plantas, sobre todo las hojas y flores. Foto: LeClan.
Plantas como la ortiga y el tusílago, considerados acondicionadores naturales por su capacidad para suavizar y facilitar el desenredado, o la cola de caballo, que hidrata y mejora la elasticidad y resistencia del cabello, son algunos ejemplos. También la milenrama, reconocida por sus propiedades calmantes y efecto purificador, se emplea para aliviar picores e irritaciones del cuero cabelludo.
Algunas firmas cosméticas incorporan extractos vegetales de estas plantas en sus productos para aprovechar sus nutrientes y propiedades beneficiosas en el cuidado capilar.