Comúnmente se le atribuyen las carreras científicas al sexo masculino. Sin embargo, una gran cantidad de mujeres también se han dedicado a la ciencia, tanto en el pasado como en el presente, aunque muchas veces han sido invisibilizadas en su profesión.

Con el objetivo de enaltecer a las mujeres en la ciencia, L’Oréal Centroamérica, Unesco y Senacyt hicieron entrega del Premio Nacional L’Oréal – Unesco “Por las Mujeres en la Ciencia” a dos destacadas científicas panameñas.

DOCTORA MARÍA BEATRIZ CARREIRA Con una madre científica, el laboratorio nunca fue un terreno extraño para María Beatriz. “Tengo muchas memorias bonitas de ello”, admite la investigadora posdoctoral. Actualmente labora en el Instituto de Investigaciones Científicas de Alta Tecnología (Indicasat AIP). Sus estudios se enfocan en el envejecimiento, a la neurodegeneración y la enfermedad de Alzheimer. Es sobre esta última a la que le dedica su proyecto.

Parte de la patología del mal de Alzheimer es la formación de placas dañinas para el tejido cerebral; los estudios de la doctora Carreira han descubierto ciertos compuestos que logran romper esas agregaciones. El siguiente paso sería aplicarle los compuestos a ratas de laboratorio con la enfermedad y comprobar si no sufren de pérdida de memoria. “Es un tema relevante para Panamá y para el mundo. Es la enfermedad más costosa, y de las que más mata”, sentencia.

Premian a dos científicas panameñas por sus investigaciones

Premian a dos científicas panameñas por sus investigaciones

La investigadora ha notado las diferencias entre hombres y mujeres en el mismo campo. “A nivel académico estamos parejos, pero cuando se torna en ser la investigadora principal, tener posiciones de liderazgo o mandos superiores, se encuentra menos representación de la mujer”.

Incluso le han preguntado cómo es la compatibilidad de ser mujer y científica. “Lo que contesto es que para ser científico solo se tiene que ser curioso, y eso es independiente del género. Todas podemos elegir en qué ponemos el esfuerzo. Para algunas es tener una carrera en ciencias; para otras es ser mamá”, exclama.

DOCTORA LAURA PATRICIA PATIÑO CANO

“Cuando ves los números de la Facultad de Ciencias, notas que el número de estudiantes que se gradúan son mayoritariamente mujeres”, declara la química Laura Patiño, quien actualmente es investigadora de la Universidad Autónoma de Chiriquí.

“En la historia los hombres han sido quienes han ejercido los puestos más fuertes y quienes han sido más reconocidos en estos temas. Por esa diferencia que todos sabemos que está, es que existe este tipo de premiaciones”.

Premian a dos científicas panameñas por sus investigaciones

Premian a dos científicas panameñas por sus investigaciones

En sexto año de secundaria, Patiño tuvo la suerte de recibir educación por parte de la profesora Aurora Moreno; fue ella quien despertó en su pupila ese deseo de curiosidad insaciable característico en el mundo de las ciencias. Rápidamente se enteró de que la química se convertiría en su pasión. “Me encanta la parte de realizar experimentos, además de sentirme muy feliz dentro de un laboratorio”, explica la científica.

Oriunda de la provincia de Chiriquí, Laura detalla que su tierra se destaca por la gran variedad de plantas y animales que se encuentran en ella, flora que tradicionalmente se ha utilizado con propósitos medicinales. No obstante, existe poca información documentada sobre las propiedades químicas de las mismas.

“Si una planta alivia un síntoma, es porque posee una propiedad química con la capacidad de hacerlo”, declara. Al percatarse de esta escasez de información, tomó la decisión de encargarse del estudio de las plantas localizadas en su provincia, para conocer a fondo sus distintas propiedades.

“Trato de buscar plantas que tengan un buen perfil, pero de las que no exista tanta documentación”, explica la doctora. “Las recolectamos y las analizamos”. Este proyecto es de suma importancia para ella, ya que le apasiona la conservación del medio ambiente. “Todas esas plantas forman parte de nuestra biodiversidad, es importante que las mantengamos y no las dejemos desaparecer”.