Elegante, versátil y con una rica historia a sus espaldas, el mocasín ha regresado con fuerza para convertirse una vez más en el calzado protagonista de la temporada. De Gucci a Balenciaga o Stella McArtney y de James Dean y Michael Jackson a Bella Hadid, este calzado se mantiene como atemporal.

Firmas como Vagabond o Ikks reinterpretan este calzado clásico con materiales nobles y diseños en tendencia como herrajes o plataformas, que dan un toque de personalidad sin renunciar a las líneas clásicas que convierten este tipo de zapato en un fondo de armario apto para cualquier ocasión.

Desde su origen humilde en las tribus nativas hasta su lugar en las colecciones de lujo y los pies de las estrellas, este zapato demuestra que, en el mundo de la moda, lo clásico nunca pasa de moda.

El regreso del mocasín: de zapato funcional a estrella

Desde su origen humilde en las tribus nativas hasta su lugar en las colecciones de lujo y los pies de las estrellas, el mocasín demuestra que -lo clásico- nunca pasa de moda. VAGABOND.IPG.

De las tribus indígenas al estilo urbano

El origen del mocasín se remonta muchos siglos atrás, cuando las tribus indígenas de América del Norte utilizaban este tipo de calzado por su comodidad y funcionalidad. Elaborados a mano con cuero flexible, los mocasines eran ligeros y permitían a los cazadores moverse sigilosamente.

La palabra mocasín proviene del término algonquino ‘makasin’, -zapato-, un calzado con un diseño inicial sencillo: una pieza única de cuero moldeada y cosida alrededor del pie, a menudo decorada con cuentas y flecos. Con la llegada de los colonos europeos, el diseño comenzó a adaptarse al gusto occidental.

En los años 1930, el mocasín tomó un giro significativo en Europa. La marca noruega Aurland introdujo su propia versión, conocida como el ‘penny loafer’, que posteriormente fue perfeccionada por la firma estadounidense G.H. Bass, con una tira de cuero en forma de labio con una abertura lo suficientemente grande como para colocar un penique.

Embajadores de la elegancia

El mocasín ganó popularidad a mediados del siglo XX gracias a figuras icónicas como Audrey Hepburn y James Dean, quienes lo integraron en sus looks tanto formales como desenfadados. Hepburn inmortalizó el mocasín negro en películas como ‘Funny Face’ (1957), mientras que Dean lo convirtió en un símbolo del rebelde elegante.

El mocasín adquirió un aire de exclusividad cuando la casa italiana Gucci lanzó su emblemático modelo con herrajes dorados en 1953. Este diseño elevó el zapato a un estatus de lujo y marcó el inicio de su asociación con la alta sociedad y la moda sofisticada.

A partir de entonces, firmas como Tod’s y Salvatore Ferragamo siguieron reinterpretando el mocasín, manteniendo viva su relevancia en el mercado de lujo hasta hoy en día, con modelos que incluyen desde plataforma a estampados o materiales de todo tipo.

El regreso del mocasín: de zapato funcional a estrella

Elegante, versátil y con una rica historia a sus espaldas, el mocasín ha regresado con fuerza para convertirse una vez más en el calzado protagonista de la temporada. Foto: Mikhail-nivov

En las pasarelas contemporáneas

En la actualidad, el mocasín ha experimentado un renacimiento creativo en las colecciones de diseñadores de renombre. Alessandro Michele, durante su etapa como director creativo de Gucci, rescató y reinventó los clásicos mocasines con detalles modernos como suelas chunky y acabados metalizados.

Prada también ha reinterpretado el mocasín con su característico enfoque minimalista, presentando modelos en charol y con plataformas robustas. La casa francesa Louis Vuitton ha apostado por este calzado, añadiendo monogramas y detalles vanguardistas que reflejan el ADN de la marca.

El mocasín, además, ha conquistado el corazón de diseñadores emergentes, quienes lo han incorporado como una pieza clave en sus colecciones. Marcas como JW Anderson y The Row han apostado por versiones híbridas que mezclan la tradición con elementos disruptivos, como suelas exageradas o texturas poco convencionales.

Celebridades que pisan fuerte con mocasines

El encanto del mocasín no se limita a las pasarelas. Famosos de todo el mundo han adoptado este zapato como parte esencial de su estilo; Michael Jackson, que hizo en los noventa de esta pieza con calcetín blanco no solo su sello estético, replicado en el mundo de la moda, hasta Zendaya, Harry Styles o las hermanas Hadid....

Otro ejemplo es Bella Hadid, quien ha popularizado los mocasines chunky en combinación con calcetines blancos, una tendencia que remite a los años 90.

En el ámbito español, nombres como Rosalía y Ester Expósito también se han sumado al fenómeno, aportando su toque personal a este clásico renovado.

El regreso del mocasín: de zapato funcional a estrella

Desde su origen humilde en las tribus nativas hasta su lugar en las colecciones de lujo y los pies de las estrellas, este zapato demuestra que, en el mundo de la moda, lo clásico nunca pasa de moda. FOTO: IKKS-BagsTrilogy

De la oficina a las calle: la versatilidad

Una de las razones por las que el mocasín sigue siendo un favorito atemporal es su adaptabilidad. Este zapato puede usarse en un entorno profesional combinado con un traje estructurado o en un conjunto casual. Además, su diseño sin cordones lo convierte en una opción práctica y cómoda para el día a día.

La tendencia actual también ha introducido nuevas maneras de estilizar el mocasín. Las plataformas gruesas han dado lugar a un aire más atrevido, mientras que los diseños en colores vivos y materiales experimentales permiten jugar con estilos audaces.

En un momento en el que la sostenibilidad es una prioridad en la moda, el mocasín también ha encontrado su espacio en este movimiento. Marcas como Stella McCartney y Veja han lanzado versiones veganas de este calzado, utilizando materiales reciclados y procesos de producción éticos. Por María Muñoz