Hace unos meses un amigo vio que yo llevaba varios billetes de un dólar en la cartera y me advirtió: “guarda eso con cuidado, que están en peligro de extinción”.

Nadie sabe lo que tiene hasta que lo pierde. Voy a desempolvar este refrán porque está igual de usado, sobado y ajado que los pocos billetes de a un dólar que circulan en Panamá, por estos días.

Ustedes — con razón— dirán: ¿ahora es que esta mujer despierta y se da cuenta de que no hay dólares de papel?

No es que me acabo de dar cuenta. Es que pensé que pronto no sería un tema de conversación. Error.

El tema no es que las monedas de a dólar pesen o deformen los monederos. El asunto es que se necesitan los billetes.

En las abarroterías, la respuesta es ‘no’ si alguien pregunta por un billete de esa denominación. “No hay”, dice quien está detrás de la caja, con la cara dura. No por maldad, más bien por cansancio de que le pregunten lo mismo todo el día, todos los días.

Un señor, delante de mí en la caja del supermercado, suplicaba por dólares. La muchacha de la caja hizo un ‘no’ con el gesto y abrió la caja para que viera que en el lugar de los billetes de a un dólar había un hueco. Estaba vacío.

La gente está desesperada porque necesita el bendito billete para recargar la tarjeta del metro y del metrobús.

¿Tanto drama por eso? Sí, es un drama porque en la ciudad, a pesar de las cifras de autos vendidos cada año, miles se mueven en transporte público. Y el futuro apunta a usar más transporte público por el bien del planeta.

El gobierno actual ha dicho que no tiene intenciones de acuñar más monedas de a dólar, pero mientras, hay 80 millones en circulación.

Hoy miles necesitan todos los días recargar tarjetas para llegar a sus destinos.

¿Sabían que las estaciones de recarga del metro no dan vuelto?

Si usted inserta un billete de cinco dólares o de diez dólares, usted no puede pedir cambio.

Yo sé que las personas que decidieron no traer dólares en papel, sino acuñar más monedas, no andan en el metro, y si lo usaran no les dolería recargar una tarjeta con un billete de a 20 dólares sin recibir cambio, pero deberían saber que la gente pasa páramo por esto. Es un problema banal para el que no lo vive.